miércoles, 9 de julio de 2025

Cercanías


"Cuando te frustres con las personas mayores por lo que no pueden hacer, piensa en lo frustrados que deben sentirse porque ya no pueden hacerlo. "
Es fácil sentir una oleada de frustración cuando un ser querido mayor lucha con tareas que alguna vez parecían simples para ellos.
Verlos luchar con la tecnología, momentos olvidadizos o limitaciones físicas puede poner a prueba nuestra paciencia. Sin embargo, en estos momentos, es esencial recordar que nuestra frustración no es más que una sombra de lo que deben estar experimentando internamente.
En el gran tapiz de la vida, los papeles que jugamos cambian a menudo. Hoy, podemos ser nosotros los que ofrezcamos apoyo; mañana, podríamos encontrarnos en necesidad de él.
Al acercarnos a nuestros seres queridos mayores con empatía, honramos su viaje y enriquecemos el nuestro, creando un legado de compasión que trasciende generaciones.